SECA FIGUES A MAELLA
La producción de higos secos constituyó antaño, en Maella, un importante
complemento de la economía familiar. De hecho, hasta mediados del siglo
pasado , trascurrido el mes de agosto, todos años comenzaba la recolección
de higos para su posterior secado y venta . Las higueras, de la variedad
“Blanca de Maella” (ficus carica) solían estar en los “ribazos” o linderos
de los bancales de la huerta del Matarraña, y su fruto era de una calidad
excelente, de reconocida fama.
![]() |
Higos en el árbol |
Eran generalmente las mujeres las que se encargaban de la ardua tarea del secado en cañizos que colocaban en solanares, eras, la propia calle o incluso en la explanada del castillo. En los cañizos se extendían los higos que había que seleccionar, voltear adecuadamente, y sobre todo proteger de la lluvia o de la humedad de la noche.
![]() |
higos secos |
Una vez secos se almacenaban convenientemente en las casas hasta su venta a almacenistas locales que se dedicaban a encajonar los higos para su comercialización posterior. Esta tarea, que podía durar hasta un mes o más, reportaba muchos jornales a decenas de mujeres que debían realizar este trabajo en jornadas de ocho o más horas y requería cierta destreza manual.
Parece ser que esta actividad fue pionera en dar de alta a las personas contratadas a modo de cotización para derechas de jubilación.
![]() |
“Añorable producción agrícola. Secado de higos en el Castillo. Años
30”. del libro “Historia de Maella” de Vicente Juste (DPZ 1995) |
Comentarios
Publicar un comentario